Viajar lejos es agotador y para muchas personas significa sufrir durante unos días con el famoso Jet Lag, la fatiga sentida por quienes viajan en avión y se someten a un repentino cambio de zona horaria, por eso el nombre en Inglés: Jet= avión y Lag= diferencia horaria. Los síntomas del Jet Lag más comunes son: náuseas, irritabilidad, dificultad para concentrarse, fatiga e insomnio. Quién está pensando en visitar o pasar un largo tiempo en Canadá es bueno seguir algunos consejos para aliviar estos efectos tan incómodos.
Según los expertos, por cada hora de diferencia en el huso horario, el cuerpo necesita alrededor de un día para ajustar. Siendo el segundo país más grande del mundo, Canadá tiene seis husos horarios. Para tener una idea, quién va a Toronto, por ejemplo, durante el verano (de marzo a noviembre) no hay diferencia horaria con Colombia, sin embargo, en invierno, es una hora de diferencia. En Vancouver, la diferencia es de 2 horas con Colombia, es decir, dos días para adaptarse, y en invierno serían 3 horas de diferencia.
Hicimos una lista de algunos consejos que pueden ayudar a reducir los síntomas causados por el jet lag.
Hora de dormir: tratar de acostumbrarse a la nueva zona horaria unos días antes del viaje. Al igual que en Canadá, el tiempo es atrasado, empezar a cambiar su horario de sueño, yendo a la cama más tarde.
Remedios para dormir: Evitar tomar pastillas para dormir durante el viaje. Ellas sólo empeoran los efectos del Jet Lag.
Alimentación: Durante el viaje elegir una dieta ligera y huir de las bebidas alcohólicas, ya que deshidratan y causan perturbaciones en el sueño.
Luz Natural: Programarse para el día que llega a Canadá e ir a disfrutar de un paseo. La luz natural disminuye la producción de mela-tonina, la hormona responsable de la sensación de cansancio.
Entre la rutina: No se salte las comidas, incluso si usted no siente hambre, coma desayuno, almuerzo y la cena. No se duerma antes de la puesta del sol.
Trate de descansar: Las primeras noches son esenciales para su cuerpo para recomponerse. Evitar esfuerzos y tratar de dormir bien.